jueves, junio 09, 2005

¿Tenemos que volver a los cincuenta?

Cuando en un momento dado nos planteamos si nuestra relación está yendo por buen camino o si es el momento de ponerle fin, lo que no podemos evitar es preguntarle a todo el mundo.
Creo que en realidad lo hacemos porque éste es un tema del que cualquiera puede opinar. Ya sean más cortas o más largas, a determinada edad todo el mundo ha tenido relaciones.
Navegando por el océano de los consejos gratuitos y las opiniones con/sin contrastar, me he encontrado con algunas cosas muy interesantes. Después de darle la tabarra con el tema por el Messenger durante casi dos horas, mi amigo el Dr. Eleder accedió a concederme una cita de urgencia ese mismo día. Estuvimos es una terraza muy agradable durante bastante rato y he aquí lo que más me llamó la atención de sus argumentos:
“Me hace gracia un cosa, no de tu caso, si no en general. En una sociedad tradicional, católica, todas esas cosas… Tú con 21 años ya habrías tomado una decisión. Estarías casada, y ese casamiento sería para siempre. Con lo que estarías obligada a mirar para delante, y a solucionar problemas, no a esquivarlos.”
Me quedé de una pieza. Madre mía, ¡es cierto! ¿Acaso esas mujeres tenían el secreto de la eterna felicidad? ¿Es posible que la paciencia y la perseverancia puedan ganar la batalla contra el “estoy hasta las narices de que mees fuera de la taza”?
Ahora los tiempos han cambiado muchísimo. Nuestra frase preferida es “hay muchos peces en el mar”, y hemos sido educados para saber que no hay que pasar ni una, pero lo que me pregunto es si de verdad estamos usando eso correctamente o nos hemos convertido en unos mimados de las relaciones.
Antes un café, era un café. Con o sin leche. Expresso o cortado o con hielo. Pero no había mucho más. ¿Habéis estado en Starbucks? Es el paraíso de la libre elección. Puedes combinar cuarenta cosas de cien formas distintas, y me pregunto si no tenemos esa misma idea a la hora de elegir pareja, y de tanto combinar y buscar la perfección absoluta nos encontramos preparando brebajes imposibles de beber.
Existe una teoría que dice que la persona perfecta para uno es la primera persona que nos encontramos y que nos atrae sexualmente salvo por…. Y aquí es donde la cosa se atasca.
En un mundo donde puedes hacer tu propio café personalizado, tienes opción de salir con quien quieras, y si no estás satisfecho, devolverlo y a otra cosa, donde somos libres para cambiar de pareja las veces que lo consideremos necesario, y demás cosas, ¿realmente nos es mas fácil encontrar la pareja perfecta, o sólo nos hace examinarle más de la cuenta? ¿Acaso para llegar a ser felices de verdad con alguien, debemos empezar por ser menos exigentes? Esta es mi pregunta:

¿Tenemos que volver a los cincuenta?

7 comentarios:

Javier Vyento dijo...

Creo que el análisis es sencillo, en el año 50 aun no existía el transistor (y mucho menos el tampón ;)) así que la respuesta es clara, jeje.

Bueno, fuera de coñas, mi opinión es que el ser humano es extremadamente adaptable, y sea como sea, si no le gusta como le van las cosas, terminará adaptandose. Supongo que si estás es un mundo starbuks y eso no te gusta, terminarás viendo que aunque tenga un poco de canela y chocolate picado, en realidad sigue siendo un café con leche.

Anónimo dijo...

Supongo q si existe starbucks es porq la gente busca algo mas q un cafe solo, y si lo busca es porq lo quiere, sera un cafe solo pero el mio tiene un terron con forma de coche.
Tambien esta la cosa de conformase con lo q hay y por eso se vendieron tantos ford T color negro, porq la publicidad decia q usted podia tener el cohe en el colo q quisiera siempre y cuando fuera negro.
Si se puede elegir entre muchas cosas es porq la gente nota la diferencia.

Anónimo dijo...

Mi humilde opinión es que no es cuestión de elección si no de la personalidad de cada uno.

Hay gente a la que le gusta el café solo,y siempre le gustará así.Da igual que se lo pongas con leche,azucar,canela,nata montada y mil pijaditas que preferirá su "cafelito" en Casa Pepe,y luego la que quiere probarlo todo, con todos los extras.

Entre esos dos extremos, hay que buscarse a uno mismo, y pensar que si podemos elegir,es en teoría, para ser más felices.

Eleder dijo...

Mi respuesta es clara, en cualquier caso (y hola, me estreno por aquí :D): NO, no hay que volver a los cincuenta.

Lo que ocurre es que hay cosas que eran correctas antes, son correctas ahora y lo seguirán siendo en el futuro, cuando haya pasado esta ola de "todovalismo" y de relativismo postmodernista que nos invade... y que espero que no haya llegado para quedarse.

Y si ha llegado para quedarse, pues bueno; encontrará al menos un enemigo firme para hacerle frente :)

Anónimo dijo...

hola!!!
bueno soy la primera chica q opina del tema. yo no creo q tengamos q volver a los 50 ni al aguantar por aguantar aunq el tipejo q tengas al lado sea un capullo q te trate fatal.Pero tb es verdad q cada vez somos mas exigentes, en mi opinion eso tampoco es malo siempre y cuando no pidamos imposibles.Y es q... todo el mundo tiene sus fallos y sus manias y a lo largo del tiempo eso q te encantaba de tu chico puedes llegar a odiarlo!! pero creo q todo tiene sus fases y q lo q hay q intentar es q esas fases sean mas o menos las mismas para los dos. Y si no lo son...El starbucks esta genial no???

Anónimo dijo...

Wenas a todos!!
En mi opinión no creo q haya q volver a los 50, ahora mismo, con nuestra edad, con la libertad q se nos da, si hay algo q no aguantas en una persona es sencillo, se habla se intenta solucionar y si sigue sin funcionar pues se deja y te buscas otro/a. Aunque de todas formas creo que a la mas mínima no se debe abandonar toda esperanza, creo q los defectos de las personas no son tan malos... joe, si todos fuesemos iguales y perfectos seria todo muy aburrido esos defectos nos hacen diferentes, cada persona es de un modo, además es bonito conocer y apreciar todos los defectos que pueda tener tu pareja.
Aunq he de reconocer q yo q limpio el baño de mi casa y me jode bastante cuando se me mean en la tapa sobre todo mi hermano.
un saludito!!

Anónimo dijo...

Esto es lo que yo pienso:
Una relacion sentimental no es como un matrimonio, no os habeis comprometido para siempre; asi que cualquier decisión es válida y legítima desde el punto de vista moral.
Ahora bien, yo soy de los que creen que hay que luchar por las personas y por la gente a la que se quiere. Obviamente, algo funcionaba bien entre los dos hace no mucho tiempo y eso es lo que hay que tratar de buscar.
Para mi, la metáfora está mal planteada desde la base. Las personas no somos cafés sino algo más importante. Pongamos un coche, por ejemplo, para continuar con las cosas materiales pero darles un toque de mayor permanencia e importancia. Una persona que cambiaria de novio/a como cambiaria de café me parece frívola y superficial. Sin embargo, una vez que te has decidido por un coche, si después de un año hay algo que no te gusta, ¿No seria mejor tratar de pulir ese defecto antes que cambiar de coche definitivamente?
Piensa en los buenos momentos que has pasado con ese coche, ¿No merece un poco de esfuerzo antes de cambiarlo?

Bueno, pues una relación es mucho más que un coche, es algo que te cambia, te hace evolucionar como ser humano, y , en la mayor parte de los casos, te hace ser mejor persona. Si un coche merece una oportunidad, no la merece tambien tu novio?
Una vez que se haya intentado y aquello que no te gustaba sigue sin tener solución, entonces mi consejo es que pases página. Pero no antes de haberlo intentado en serio. Pîensa que nunca te arrepentirás de haber trabajado en una relación en la que llevas más de un año pero sí de no haber hecho lo suficiente para conservarla.